domingo, 10 de noviembre de 2013

¡EL ALSA TIENE GUASA!

        "Viajas más que la Piker" eso me dice mi madre cuando me cojo un autobús y me voy a Galicia. Si, es verdad que por cosas de la vida, paso muchas horas en la carretera. Por supuesto que no me importa ya que es por temas de amor. Aun así, me gusta irme unos días, desaparecer y cambiar de aires. 

Viajo tanto que Alsa debería ponerme una alfombra roja, tratarme de usted y una pantalla plana con un listado de películas( que por cierto aprovecho para decir que las de Joselito y Charlie Chaplin están muy vistas y son un poquito viejas).Pero bueno con que no me vuelvan a perder la maleta, me conformo( Sin rencores).

La media de viaje son 8 horas, se que vais a pensar que de aquí a Galicia no hay tanto, y es verdad no hay tanto. El problema esta cuando hacen trayectos entre pueblos perdidos de la mano de dios.
Después de haber leído un buen trozo de libro, de haber mirado 20 veces el facebook, de haber visto una de las películas de Joselito en 3D,de haber dormido como se puede, de haber leído mi revista de cotilleos y no se cuantas cosas más... lo que me queda es hablar con los pasajeros. Normalmente son personas de una avanzada edad y casi siempre mujeres. Ellas me cuentan su vida y yo escucho. 

     El día del accidente de tren de Santiago, 24 de Julio, iba yo de camino a Galicia en Autobús. Empece mi trayecto sola pero en Laredo se subió la señora que me acompañaría todo el viaje. Una señora de unos 70 años, rubita, delgada y muy bien conservada. Le faltaron unos 20 minutos para empezar a hablarme y empezar a contarme su vida. Ella era gallega, había vivido en muchos sitios.Cuando se casó se fue a Francia a vivir con su marido, allí tuvo a sus 3 hijos. Trabajaba cuidando a los hijos de los artistas Franceses( fue ahí cuando capto mi atención). Después de haber vivido en el país Francés 40 años decidió volver a España a gozar de su jubilación. Ahora estaba viuda y vivía sola en Santiago de Compostela.
 Le hice saber que me gustaba su acento gallego-francés. 

Mientras me contaba más cosas sobre su vida la radio daba la noticia de la tragedia del tren. Todos los pasajeros nos llevamos las manos a la cabeza sin saber muy bien lo que había sucedido porque la información era escasa. La mayoría de los viajeros iban para Santiago, en ese momento el único ruido que sonaba era el motor del autobús y la radio del conductor. Al principio los fallecidos eran entre 20 y 30. 
La señora, cuyo nombre no recuerdo, solo rezaba y miraba al cielo. Unos llamaban a sus familias y otros las recibían.
Recibíamos información con colador, el numero de los fallecidos crecía a medida que pasaba el tiempo. Se podía ver la agonía de las personas que estábamos allí, sobretodo de la señora que suspiraba y sudaba como cosa mala. Se me paso por la cabeza la idea de que se pudiera desmayar por eso le pregunte varias veces si se encontraba bien. 
Cuando supimos que había sido un accidente y que había 78 muertos, la mujer gritaba " MADRE MÍA". Se acerco a mi y me dijo al oído " Eso no ha sido un accidente, eso ha sido un atentado, que lo se yo" a mi solo se me ocurrió hacer una sonrisa fingida.  Ella siguió diciéndome...

- Eso ha sido un atentado y no han sido los vascos. Yo ya se quien ha sido, claro que lo se. Pero no lo puedo decir porque sino me matan, yo soy una de las pocas personas que lo se.

- Ya... claro...- Dije sin saber que coño decir ¡Solo quería que se callase!

- Mira te lo voy a contar( hizo un barrido y miro por todo el autobús) son unos portugueses que ahora están en Galicia y yo se quienes son y ellos me conocen. Ellos son los que han hechos esta desgracia, claro que si, pero claro no puedo decir nada porque sino me cortan el cuello.- Dijo en voz baja y seguido hizo el gesto del dedo indice pasando por el cuello, como si se lo cortaran. 

De repente el chófer dice " Queridos pasajeros haremos una parada de 10 minutos". ¡¡MENOS MAL!! porque esta señora me estaba empezando a dar miedo.
Cuando el autobús se pone de nuevo en marcha, la señora psicópata me contó que para pasar el mal rato se tomo un whisky doble. Yo ya pensé que se volvería más loca de lo que estaba pero el alcohol me hizo un favor y se quedo dormida. 
Yo llegue a mi destino alucinada del viajecito que me había dado la señora. Que razón tiene el refrán que dice...
" LAS APARIENCIAS ENGAÑAN"

 





Ya os contare más historias sobre mis viajes y personajes curiosos.


SED FELICES.


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